Arroz con puntillitas

Esta receta la tengo en la recámara desde hace un mes, pero entre una cosa y otra, se me ha ido pasando... A mi novio no le gustaron mucho, según él arroz y puntillitas, mejor cada uno por su lado. No lo entiendo, porque a mi me encantó como quedó de sabor..

Podéis añadir las verduras que prefiráis. Unas judías verdes, unos guisantitos, un poco de pimiento morrón... Al gusto de vuestra familia.

Ingredientes..
- 3 puñados de arroz
- 300gr de puntillitas
- 1 pimiento verde
- 1/2 cebolla
- 2 dientes de ajo
- colorante
- caldo de pescado
- limón

Preparación..
Limpiamos a conciencia las puntillitas y reservamos. Picamos fino las verduras y sofreímos en un fondo de aceite. Echamos en la cazuela el arroz, salteamos ligeramente y cubrimos con el caldo de pescado.

Añadimos una pizca de colorante y un chorreón generoso de zumo de limón.Se incorporan las puntillitas y dejamos 20 minutos a fuego medio, vigilando que no se pegue el arroz al fondo de la cazuela. Dejamos que repose tapado un par de minutos fuera del fuego, y listo para servir. 

Nota. Si no tenéis caldo de pescado podéis improvisarlo deshaciendo media pastilla de concentrado de pescado en el agua necesaria para la receta. No es lo mismo, pero da el apaño. 

Lagrimitas de pollo

Día de parque improvisado, algo hay que llevar de picoteo. El frigorífico en las últimas pero consigo rescatar un par de pechugas de pollo con muy buena pinta. Y en muy poco tiempo un almuerzo perfecto para echar en el taper y disfrutar en el césped.

Ingredientes..
- 500gr de pechuga de pollo
- 1/2 limón
- 2 huevos
- pan rallado
- perejil
- ajo en polvo
- sal

Preparación..
Cortar el pollo en trozos de bocado, salar y regar generosamente con el zumo del limón. Si es posible dejamos 1 hora reposando en el frigorífico, para que coja bien el sabor del aliño. Si no tenéis tiempo, no pasa nada, nos vamos directamente al siguiente paso.

Mezclamos el pan rallado con perejil picado muy fino y con el ajo en polvo. Pasamos los trocitos de pollo con el huevo batido y el pan rallado, y freimos en abundante aceite caliente. En tandas pequeñas y vigilando en cuanto veamos que el empanado coge color doradito sacamos para que no se nos queden muy secos.