¿Quien no se ha preparado alguna vez un buen plato de patatas fritas acompañado tan solo de un chorreón de salsa de tomate? La que escribe, alguna que otra vez se ha dejado llevar por la gula y ha disfrutado como una niña chica delante del plato... Acompañando con una buena pieza de pan, que no hay mayor gustazo que rebañar el plato al terminar...
Pues en este caso, muy parecido pero más sano ya que quitamos la fritura de las patatas de la receta. Y añadimos unos champiñones para darle algo más de sabor. Perfecto tal cual, lo puse como plato único para la cena. Aunque según el niño, le faltaba algo de consistencia, un filete o algo así, decía... Si es que no tiene remedio.
Ingredientes..
- 3 patatas medianas
- 400 gr de tomate triturado
- 1 lata de champiñones laminados
- 1/2 cebolla
- 1 diente de ajo
- vino blanco
- orégano
- pimienta negra
Preparación..
Pelar las patatas y cortarlas en rodajas finas. Colocar en un recipiente apto para microondas, salar al gusto y regar con un poco de aceite de oliva. Meter al microondas 6-7' a máxima potencia, o hasta que veáis que estén tiernas. Para que se hagan correctamente poner poca cantidad cada vez, yo para estas cantidades las cocí en 2 tandas.
Mientras cortar la cebolla en juliana y pochar a fuego lento. Añadir el ajo picado fino y los champiñones laminados. Cuando éstos estén dorados echar el contenido de la lata de tomate, un chorreón de vino blanco y las especias. Incorporar las patatas, mezclándolas con el resto, y dejar a fuego medio unos 10 minutos.
¿Y qué hacemos si nos sobra algo? Muy fácil, directo al taper. Con algún acompañamiento ya tenemos el almuerzo para el día siguiente.
martes, 10 de enero de 2012
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